El sistema americano de libre empresa se basa en la premisa de que cada individuo puede beneficiarse en proporción a su trabajo. En el ambiente global, altamente competitivo y agitado de hoy, sin embargo, puedes sentirte que no se te reconoce y no se te recompensa por la contribución que aportas con tu trabajo. La siguiente ocasión que te sientas con sobrecarga de trabajo, mal pagado y no valorado, piensa que realmente estás en el negocio para sacar provecho de ti mismo y que tu producto eres tú mismo. Pregúntate, ¿Cómo me sentiría produciendo en caso de yo fuera el jefe? Cuando estés reconsiderando una difícil decisión o cuando estés pensando como evitar una tarea desagradable en el trabajo, pregúntate, ¿Si ésta fuera mi compañía, como manejaría esta situación? Cuando tu respuesta es desempeñarte como empleado pensando como si fuera tu propia empresa, estarás encaminado para cosas mejores y más grandes. Y seguro que pronto llegarás a ser jefe.