Cuando te involucras en una disputa con alguien más, puede que sea la única ocasión o situación en la que no hacer nada es mejor que hacer algo. Hay una razón práctica para entenderlo mejor. Cuando discutes con los demás, incluso aún habiendo salido airoso de la discusión, te llenas innecesariamente de estrés. Es imposible mantener una Actitud Mental Positiva en tal situación cuando mantienes emociones negativas como el coraje y el odio, o te dejas dominar por tus instintos. Nadie te puede sacar de quicio o hacerte enojar a menos que tú lo permitas. En lugar de discutir con los demás, intenta indagar los motivos del desacuerdo con los demás preguntando: “¿Por qué te sientes así?”, “¿Qué hice para que te enojaras de esa forma?” o “¿Qué puedo hacer para ayudar a solucionar esto?”. Al hacerlo encontrarás que toda la situación es simplemente el resultado de un mal entendido que rápidamente puede ser rectificado. Incluso si los problemas son más serios, tu comportamiento positivo ayudará significativamente a resolver el conflicto.