Abraham Lincoln alguna vez dijo: “Puedes hacer tonta a algunas gentes por algún tiempo, puedes incluso engañarlos a esos pocos durante todo el tiempo; pero no podrás hacer tontos a todos por todo el tiempo”. Independientemente de lo inteligente que puedas ser, siempre habrá gentes que en su momento descubrirán tus intenciones y te desenmascaran y tarde o temprano la verdad saldrá a la luz. Por regla general, la gente te acepta por lo que dices y esa idea se mantiene hasta que se pone a prueba tu sinceridad. Por ello nunca te aproveches de la bondad y nobleza de los demás. En vez de eso, gánate amigos, no enemigos.